CARBONO
Aerogeles de
carbono se componen de partículas con tamaños en el rango nanométrico, unidos
entre ellos covalentemente. Tienen muy alta porosidad y áreas de superficie que
oscila entre 400-1.000 m2/g. A menudo se fabrican como papel compuesto: papel
no tejido hecho de fibras de carbono, impregnadas con aerogel de
resorcinol-formaldehído, y pirolizados. Dependiendo de la densidad, los
aerogeles de carbono pueden ser eléctricamente conductora, de fabricación de
papel material compuesto de aerogel útil para electrodos en condensadores o
electrodos de desionización. Debido a su extremadamente alta área de
superficie, aerogeles de carbono se utilizan para crear supercondensadores, con
valores que van hasta miles de faradios en base a una capacitancia de 104 F/g y
77 f/cm3. Aerogeles de carbono también son extremadamente "negro" en
el espectro infrarrojo, que refleja sólo el 0,3% de la radiación entre 250 nm y
14,3 m, haciéndolos eficiente para colectores de energía solar.
El término
"aerogel" se ha utilizado incorrectamente para describir las masas
amplias de los nanotubos de carbono producidas por ciertas técnicas de
deposición química de vapor - tales materiales pueden hilarse en fibras con una
fuerza mayor que el Kevlar
propiedades eléctricas únicas. Estos materiales no
son los aerogeles, sin embargo, ya que no tienen una estructura interna
monolítica y no tienen el poro regular de estructura característica de los
aerogeles.
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